Lámparas UV
Las lámparas UV que utiliza la impresora para curar los materiales de impresión contienen una pequeña cantidad de mercurio. En el caso improbable de que la lámpara se rompa, evite inhalar el vapor de mercurio y ventile la sala. Si se rompe la lámpara durante el funcionamiento, retírese de la sala y ventílela completamente durante 30 minutos aproximadamente.
Use guantes de protección para evitar el contacto con el mercurio y otros componentes de la lámpara. Retire con cuidado el mercurio derramado con un elemento que evite la generación de vapor de mercurio, como una jeringa, cinta de embalaje o papel.
Coloque la lámpara rota, el mercurio y los materiales contaminados en un envase hermético no metálico. Deseche el envase de acuerdo a la normativa correspondiente.